Michel Coquet
El enigma del Conde de Saint-Germain, su origen, historia y funciones secretas en este mundo, sigue siendo un apasionante asunto de investigación y de eterna indagación para los esoteristas y los historiadores de lo oculto. Hizo una súbita aparición en los salones de toda Europa en el siglo XVIII, y se le atribuye una participación activa en la Revolución Francesa, junto a otros grandes adeptos como Louis-Claude de Saint-Martín o Alexandro Cagliostro, el Gran Copto, los que, al parece, actuaron en diferentes planos de la sociedad de su época y tuvieron un más que relevante papel en la Iniciación Occidental.
Sus viajes por toda Europa, Arabia, la India, China y otros muchos lugares, fueron testigos de su extraordinario saber e infinita compasión por la Humanidad, a pesar de que tantas veces fueron desoídos sus consejos como malinterpretadas o tergiversadas sus palabras y saboteadas sus intenciones pacificadoras. Políglota, diplomático, alquimista, músico y pintor de talento, seguramente alcanzó la Piedra Filosofal con la cual podía alterar los estados de la materia, elevar, transmutar y transubstanciar su propia naturaleza, por la que la Tradición y las leyendas le considera un Inmortal.